4 Marzo, 2022 Cristo News / Recursos Bíblicos – Provisión Diaria – Vida Cristiana – Buenas Nuevas

16 Toda la Escritura es inspirada por Dios, y útil para enseñar, para redargüir, para corregir, para instruir en justicia, 17 a fin de que el hombre de Dios sea perfecto, enteramente preparado para toda buena obra. 2 Timoteo 3:16-17 RVR1960 / Cristo News

Cristo News – By Juvenal Cubillán

La Palabra de Dios

Romanos 8:14-15 NVI

14 Porque todos los que son guiados por el Espíritu de Dios son hijos de Dios. 

15 Y ustedes no recibieron un espíritu que de nuevo los esclavice al miedo, sino el Espíritu que los adopta como hijos y les permite clamar: «¡Abba! ¡Padre!»

Comentario sobre esta provisión

Estos son hijos de Dios: Es adecuado que los hijos de Dios sean guiados por el Espíritu de Dios. Sin embargo, no debemos pensar que ser guiados por el Espíritu es una condición previa para ser un hijo de Dios. En lugar de eso, nos hacemos hijos primero y luego el Espíritu de Dios nos guía.

Pablo no dijo: “Todos los que van a la iglesia, estos son hijos de Dios”. Él no dijo: “Todos los que leen sus Biblias, estos son hijos de Dios”. Él no dijo: “Todos los que son patriotas de su país, estos son hijos de Dios”. No dijo: “Todos los que participan en la comunión, estos son hijos de Dios”. En este texto, la prueba para ver si somos hijos es si somos guiados por el Espíritu de Dios.

¿Cómo nos guía el Espíritu Santo?

· Somos guiados con dirección.

· Somos guiados al acercarnos.

· Somos guiados por un gobierno de autoridad.

· Somos guiados mientras cooperamos con el líder. “No dice: ‘Todos los que son conducidos por el Espíritu de Dios’. No, el diablo es un conductor, y cuando entra en los hombres o en los cerdos, los conduce furiosamente. Recuerda cómo todo el hato corrió violentamente hacia el mar y se ahogaron. Cuando veas a un hombre fanático y salvaje, cualquier espíritu que haya en él no es el Espíritu de Cristo”. (Spurgeon)

¿A dónde nos guía el Espíritu Santo?

· Nos guía al arrepentimiento.

· Nos guía a pensar poco en nosotros y mucho en Jesús.

· Nos guía a la verdad.

· Nos guía al amor.

· Nos guía a la santidad.

· Nos guía a ser útiles.

Pues no habéis recibido el espíritu de esclavitud para estar otra vez en temor, sino que habéis recibido el espíritu de adopción: El vivir como un hijo de Dios significa una relación íntima, de gozo, con Dios, no como la esclavitud y temor mostrados por la ley. Un hijo de Dios puede tener una relación tan cercana con Dios que puede clamar: ¡Abba, Padre! (¡Papi!).

Clamamos: ¡Abba, Padre! Es fácil para nosotros ver a Jesús relacionándose con el Padre con esta confianza bienaventurada, pero podemos pensar que no somos dignos de hacerlo nosotros. Sin embargo, recuerda que estamos en Cristo: tenemos el privilegio de relacionarnos con el Padre de la misma manera que lo hace Cristo Jesús.

“En el mundo Romano del primer siglo D.C., un hijo adoptivo era un hijo elegido deliberadamente por su padre adoptivo para perpetuar su nombre y heredar sus bienes; no era inferior en estatus a un hijo nacido del curso ordinario de la naturaleza”. (Bruce)

Bajo la adopción romana, la vida y la posición del hijo adoptado cambiaban completamente. El hijo adoptivo perdía todos los derechos de su antigua familia y ganaba todos los nuevos derechos de su nueva familia; La vieja vida del hijo adoptado era completamente borrada, con todas las deudas canceladas, sin nada de su pasado contado en su contra.

Fuente: Biblia Nueva Versión Internacional/ Biblia Versión Reina Valera 1960

Con información de:

https://www.biblegateway.com/passage/?search=romanos+8%3A10+&version=NVI

https://es.enduringword.com/comentario-biblico/romanos-8/

Compartir: