2 Enero, 2022 Cristo News / Recursos Bíblicos – Provisión Diaria – Vida Cristiana – Buenas Nuevas

Toda la Escritura es inspirada por Dios, y útil para enseñar, para redargüir, para corregir, para instruir en justicia, a fin de que el hombre de Dios sea perfecto, enteramente preparado para toda buena obra. 2 Timoteo 3:16-17 RVR1960 / Cristo News

Cristo News – By Juvenal Cubillán

La Palabra de Dios

2 Corintios 5:17 NVI

Por lo tanto, si alguno está en Cristo, es una nueva creación. ¡Lo viejo ha pasado, ha llegado ya lo nuevo!

Comentario sobre esta provisión

Si alguno: Esta es una promesa para cualquiera. ¡Si alguno! No importa la clase, la raza, la nacionalidad, el idioma, o el nivel de escolaridad. «Alguno» se refiere a que cualquier persona puede ser una nueva creación en Cristo Jesús.

Está en Cristo: Esta es una promesa para aquel que está en Cristo. Esta no es una promesa para aquellos que están centrados en sí mismos, o en la religión del hombre, o en alguien o algo más. Esto es para aquellos que están en Cristo.

Nueva criatura es; las cosas viejas pasaron; he aquí todas son hechas nuevas. Pablo aquí enseña el gran principio de la «regeneración»: Cristo Jesús cambia a aquellos que vienen a Él por fe, a los que están en Cristo. Los salvos no son únicamente «perdonados». Ellos son transformados en una nueva criatura.

Es injusto esperar que aquellos que no están en Cristo vivan como si fueran una nueva criatura. Sin embargo, no es injusto esperar una vida cambiada de las personas que dicen que son cristianos. «No conozco ningún lenguaje, no creo que haya alguno, que pueda expresar una renovación más grande o más exhaustiva, que aquella que es expresada en el término de ‟nueva criatura”». (Spurgeon)

Sin embargo, el ser una nueva criatura no significa que somos perfectos. Significa que somos cambiados, y que estamos siendo cambiados.

En la versión Reina Valera 1960 este verso inicio con la orcaión de modo que. Esta frase «de modo que» nos remite a los versículos 14-16 donde Pablo nos dice que todos los creyentes han muerto con Cristo y ya no viven para sí mismos. Nuestras vidas ya no son de este mundo; ahora son espirituales. Nuestra «muerte» es la de la vieja naturaleza pecaminosa que fue clavada en la cruz con Cristo. Fue sepultada con él, y así como él fue resucitado por el padre, así también nosotros somos levantados para «andar en vida nueva» (Romanos 6:4). Esa nueva persona que fue levantada es la que Pablo menciona en 2 Corintios 5:17 como la «nueva criatura».

¿Quién nos hace una nueva criatura? Esto es algo que solamente Dios puede hacer en nosotros. Esto no es «girar hacia una nueva página» o «conseguir hacer las cosas como es debido». Vivir como una nueva criatura es algo que Dios hace en nosotros, usando nuestra voluntad y nuestras elecciones. Así que, se nos dice que «nos despojemos del viejo hombre, y que vistamos del nuevo hombre, creado según Dios en la justicia y santidad de la verdad» (Efesios 4:22-24).

El ser una nueva criatura es un regalo de Dios, el cual se recibe por fe. «Dios es tanto el autor de la segunda creación como de la primera» (Harris). Esta es «una frase que argumenta el cambio más grande imaginable, y el cual únicamente puede ser traído al alma por el poder de Dios». (Poole)

Pero, para entender la nueva criatura, primero debemos inferir que en realidad es una creación, algo creado por Dios. Juan 1:13 nos dice que este nuevo nacimiento se produjo por la voluntad de Dios. No hemos heredado la naturaleza nueva, no decidimos re-crearnos a nosotros mismos una vez más, ni tampoco Dios limpió nuestra vieja naturaleza; él creó algo totalmente fresco y único. La nueva creación es completamente nueva, traída de la nada, al igual que todo el universo fue creado por Dios, ex nihilo, de la nada. Sólo el creador puede lograr tal hazaña.

La obra de convertir a alguien en una nueva criatura es aún más grande que la obra de la creación del mundo por parte de Dios. «Hermanos míos, fue más difícil, si tales términos se pueden aplicar a la Omnipotencia, el crear a un cristiano que el crear al mundo. ¿Qué había para empezar cuando Dios creó el mundo? No había nada; pero nada se podía interponer en el camino de Dios. Pero, hermanos míos, en nuestro corazones, mientras no había nada que pudiera ayudar a Dios, sí había mucho que se podía oponer a él. Nuestra necia voluntad, nuestros profundos prejuicios, nuestro arraigado amor a la iniquidad; todos estas cosas, gran Dios, se oponen, y su meta es frustrar tus diseños […]. Sí, gran Dios, fue muy grande hacer al mundo, pero es más grande crear una nueva criatura en Cristo Jesús». (Spurgeon)

El vivir como una nueva criatura es algo que Dios obra en nosotros, utilizando nuestra voluntad y nuestras elecciones. Así que debemos hacer ambas cosas: recibir el regalo de ser nueva criatura y vivir la vida de una nueva criatura. Todo esto es la obra de Dios en nosotros, a la cual debemos de someternos. Esto nos recuerda que, en sus inicios, el cristianismo se trata de lo que Dios hizo por nosotros, no de lo que podemos o debemos hacer por Dios. «Amados, si no tienen más religión que la que han construido ustedes mismos, y no tienen más gracia que la que han hallado en su naturaleza, no tienen nada. Una obra sobrenatural del Espíritu Santo debe ser traída a cada uno de nosotros, si hemos de ver el rostro de Dios con aceptación». (Spurgeon)

«las cosas viejas pasaron». Lo «viejo» se refiere a todo lo que es parte de nuestra vieja naturaleza, el orgullo natural, el amor al pecado, la confianza en las obras, y nuestras opiniones, hábitos y pasiones pasadas. Más importante aún, lo que amábamos ha muerto, especialmente el máximo amor a uno mismo y con ellos la jactancia, la auto-promoción y la auto-justificación. La nueva criatura ve externamente y pone su mirada en Cristo en lugar de verse interiormente a sí mismo. Las cosas viejas murieron, se clavaron en la cruz con nuestra naturaleza pecaminosa.

Todas son hechas nuevas: Es el lenguaje de la obra perfecta y recreada de Dios (Apocalipsis 21:5). Dios quiere hacer cosas nuevas en nuestra vida.

Y «¡lo nuevo ha llegado!». Las cosas viejas y muertas se reemplazan con cosas nuevas, llenas de vida y de la gloria de Dios. El alma del recién nacido se deleita en las cosas de Dios y aborrece las cosas del mundo y de la carne. Nuestros propósitos, sentimientos, deseos e ideas son frescos y diferentes. Vemos el mundo de manera diferente. La biblia parece ser un nuevo libro, y aunque la hayamos leído antes, hay una belleza en ella que nunca vimos antes, y que nos maravillamos de no haber percibido. 

Ahora bien, ¿Qué pasa con el cristiano que sigue pecando? Hay una diferencia entre seguir pecando y seguir viviendo en pecado. Nadie alcanza la perfección de vivir sin pecado en esta vida, pero el cristiano redimido está siendo santificado (hecho santo) día a día, pecando menos y odiando más el pecado cada vez que falla. Sí, todavía pecamos, pero en la medida que maduramos lo hacemos involuntariamente y con menor frecuencia. Nuestra nueva naturaleza odia el pecado que todavía tiene poder sobre nosotros. La diferencia es que la nueva creación ya no es esclava del pecado, como fuimos anteriormente. 

La nueva creación es una cosa maravillosa, formada en la mente de Dios y creada por su poder y para su gloria.

Fuente: Biblia Nueva Versión Internacional / Biblia Versión Reina Valera 1960

Con información de:

https://www.gotquestions.org/Espanol/nueva-criatura.html

https://www.biblegateway.com/passage/?search=2+corintios++5%3A17&version=NVI

https://es.enduringword.com/comentario-biblico/2-corintios-5/

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